El Mapa del Maestrazgo Nuevo de Tomás López (1786). Cuando por error tipográfico a Artaj (o Artax) le llamaron Casas de Arteag.
Tomás López de Vargas Machuca (Madrid, 1730 – idib., 1802) fue un geógrafo y cartógrafo español del período ilustrado. Recibió el título de geógrafo de los dominios de Su Magestad y estuvo al mando del Gabinete de Geografía creado por el monarca Carlos III. El principal proyecto en el que trabajó fue el levantamiento de mapas de las regiones de España.
En 1752 el marqués de la Ensenada, ministro de Fernando VI de España, envió a Tomás López junto a Juan de la Cruz a París para adquirir la necesaria formación en materia de redacción de mapas en los cursos del Colegio de Mazarin y en el taller del cartógrafo Bourgignon D’Anville. A su regreso en 1760, Tomás López se planteó un nuevo proyecto cartográfico en el que había de seguir las pautas y criterios recibidos en París, que le llevaron a recopilar datos geográficos a través de encuestas sin realizar trabajos de campo.
En 1786 publicó por encargo del Real y Supremo Consejo de las Ordenes Militares un mapa geográfico del Maestrado Viejo y otro del Maestrado Nuevo.
El título del mapa es «Mapa geográfico de una parte del Reyno de Valencia en la que se comprehenden los pueblos que tiene la Orden de Montesa en el distrito del Lugar Teniente General o Maestrado Nuevo [Material cartográfico] / Hecho de acuerdo y a costa del Real y Supremo Consejo de las Órdenes. Por Don Tomás López, Geógrafo de los Dominios de S. M.«.
Escala [ca. 1:411.000]. 9 Leguas de 20 al grado llamadas de Marina, y también de una hora de camino, cada una contiene 6.626 V.s [= 12,1 cm]
La producción de mapas elaborados por Tomás López fue muy amplia que sus hijos Juan y Tomás recopilaron en parte y publicaron en el Atlas Geográfico de España de 1810. Como he mencionado anteriormente, las fuentes principales de la información cartográfica utilizada en sus mapas, sin medidas topográficas, proceden de la encuesta efectuada a través de cuestionarios enviados a obispos, párrocos, personas responsables de la administración y maestros de cada localidad. Se pedía en ella que se dibujase un mapa o plano que abarcase los alrededores del pueblo, que serviría de base informativa para la formación del mapa general.
A partir de las contestaciones recibidas se redactaron los mapas, que si bien carecían de rigor y precisión métrica, aportan visiones globales de los asentamientos de población, vías de comunicación e hidrografía, con un dibujo claro, simple y de fácil interpretación. La morfología del territorio se representa mediante dibujo de perfiles abatidos, sin cotas, es decir,, reemplaza la altimetría por figuras que, en sus elementales trazos sugieren montañas de mayor o menor tamaño según sea su altitud real estimada por el autor. Estos mapas, aun con estas carencias, dan una información territorial muy válida, y en todo caso, la única disponible para llenar el vacío cartográfico que se produce hasta bien entrado el siglo XIX.
Precisamente esta falta de rigor es algo que podemos comprobar en el Mapa del Maestrado nuevo de Tomás López, donde por un error tipográfico denomina a nuestra aldea como Casas de Arteag.
También podemos comprobar que las poblaciones de La Pobleta y Andilla están intercambiadas de sitio, etc.. Algunos otros ejemplos de erroresEn este interesante trabajo de Vicenç M. Rosello i Verger de la Universidad de Valencia , de donde he sacado el extracto de la imagen anterior, podéis leer comentarios (en valenciano) a este mapa (fuente: Museo Parroquial de Montesa)